7.26.2011

MENSAJE A JENIFFER


(de VILLA FORTUNA)



Jeniffer,

Ya que me das la oportunidad, quisiera comentar algo sobre VILLA FORTUNA la primera novela. Por ciertas circunstancias que ojalá algún día podamos comentar, soy un escritor que ha llegado a la novelística siendo ya viejo. Eso, naturalmente tiene sus inconvenientes, pero así mismo me da alguna ventaja. Me refiero al hecho de que tengo una formación bastante rica que naturalmente, no sirve para nada que corresponda al mundo de la oferta y la demanda, pero al menos, me permite percibir el nivel de escritura... Soy además (creo, espero) muy auto-critico. No deseo extenderme sobre esto.

La verdad es que al momento no he tenido una buena crítica para VILLA FORTUNA pero yo creo saber donde reside la debilidad de esta novela. Por eso me he permitido ciertas larguezas con los comentarios.

Todo esto me hace recordar a Truman Capote... “Dios nos da un látigo pero es para auto flagelarnos” (decía o algo así decía , cito de memoria).

Sin embargo, a lo que quisiera apuntar aquí es a cierta virtud de VILLA FORTUNA. De esa novela podría decirse que es una novela negra de la Guerra sucia. Me explico:

Ricardo Piglia, ha hecho una diferenciación entre la novela policíaca y la novela negra:

“Lo que en principio une a los relatos de la serie negra y los diferencia de la obra policiaca clásica es un trabajo diferente con la determinación y la causalidad.  La obra policiaca inglesa separa el crimen de su motivación social.  El delito es tratado como un problema matemático y el crimen es siempre lo otro de la razón.  Las relaciones sociales aparecen sublimadas: los crímenes tienden a ser gratuitos porque la gratuidad del móvil fortalece la complejidad del enigma.  Habría que decir que en esos relatos se trabaja con el esquema de que a mayor motivación menos misterio.  El que tiene razones para cometer un crimen no debe ser nunca el asesino: la retórica del género nos ha enseñado que el sospechoso, al que todos acusan, es siempre inocente.  Hay una irrisión de la determinación que responde a las reglas mismas del género.”1

Es muy rico este corto análisis de Piglia, se encuentra en la web en …. http://www.novelanegra.es/lo-negro-del-policiaco-ricardo-piglia/

Como contraposición a esa novela policíaca que se erige como producto de la mente (Posiblemente esa idea esté en el origen del culto de Poe por la razón), surge en nuestra época la novela negra.

“Así, mientras en el relato policiaco clásico todo se resuelve a partir de una secuencia lógica de hipótesis, 39 deducciones con el detective inmóvil, representación pura de la inteligencia analítica (un ejemplo a la vez límite y paródico puede ser el Isidro Parodi de Borges y Bioy Casares que resuelve los enigmas sin moverse de su celda), en la novela policiaca norteamericana no parece haber otro criterio de verdad que la experiencia: el investigador se lanza, ciegamente, al encuentro de los hechos, se deja llevar por los acontecimientos y su investigación produce, fatalmente, nuevos crímenes. “


Es el mundo de la NOVELA NEGRA según Piglia que no oculta su admiración por esta forma de novelar y registra incluso -en un apunte sorprendente- el lugar y la fecha de su nacimiento :

De hecho el género se constituye en 1926 cuando el "Capitán" Joseph T.  Shaw se hace cargo de la dirección de Black Mask, pulp magazine fundado en 1920 por el muy refinado crítico Henry L.  Mencken. 


No es un mero hecho anecdótico, lo que se propuso Shaw fué mostrar el nudo de problemas que se engendraban a partir de la crisis de los años 30 en los Estados Unidos. Se puede suponer que es esta interpretación la que hace que pronto se vea rodeado de grandes escritores

Shaw le dio a Black Mask una línea y una orientación y todos los grandes escritores del género (antes que nada Dashiell Hammett, pero también Horace McCoy, William Burnett, Raoul Whitfield, James Cain, Raymond Chandler) publicaron sus primeros relatos en la revista.

Al tiempo se manifiesta en el país una pléyade de grandes escritores que coinciden en abandonar la vieja estructura y mostrar la problemática social. Piglia da una larga lista en la que se destacan Scott Fitzgerald, el Hemigway de “los asesinos”, (En la historia del surgimiento y la definición del género el cuento de Hemingway "Los asesinos" (1926) tiene el mismo papel fundador que "Los crímenes de la calle Morgue" (1841) de Poe con respecto a la novela de enigma.) Faulkner... Es una revalorización crítica de la sociedad que tiene consecuencias en la literatura. O como Piglia la llama “la toma de conciencia social de los escritores norteamericanos”. Actualmente hay excelentes escritores americanos que siguen esa orientación. Es el caso de Jeffery Deaver de lo mejor para mi gusto...

Las consideraciones alrededor de esto tiene sus consecuencias y son ricamente tratadas por Piglia.

“Los relatos de la serie negra (los thriller como los llaman en Estados Unidos) vienen justamente a narrar lo que excluye y censura la novela policiaca clásica.  Ya no hay misterio alguno en la causalidad: asesinatos, robos, estafas, extorsiones, la cadena siempre es económica.  El dinero que legisla la moral y sostiene la ley es la única razón de estos relatos donde todo se paga.  Allí se termina con el mito del enigma, o mejor, se lo desplaza”

Parecería haber cierto determinismo en esta visión. Pero no creo que el problema sea la visión, es la realidad... Todas las grandes guerras, las grandes matanzas, las hambrunas, (y ahora las pestes) tienen quiérase o no el mismo fondo económico... Es la aventura de los monopolios, el juego del capital financiero.. En cierto sentido -desgraciadamente- el mundo se ha vuelto más simple.


“En estos relatos el detective (cuando existe) no descifra solamente los misterios de la trama, sino que encuentra y descubre a cada paso la determinación de las relaciones sociales.  El crimen es el espejo de la sociedad, esto es, la sociedad es vista desde el crimen: en ella (para repetir a un filósofo alemán) se ha desgarrado el velo de emocionante sentimentalismo que encubría las relaciones personales hasta reducirlas a simples relaciones de interés, convirtiendo a la moral y a la dignidad en un simple valor de cambio.  Todo está corrompido y esa sociedad (y su ámbito privilegiado: la ciudad) es una jungla: "el autor realista de novelas policiacas –escribe Chandler en El simple arte de matar– habla de un mundo en el que los gángsters pueden dirigir países: un mundo en el que un juez que tiene una bodega clandestina llena de alcohol puede enviar a la cárcel a un hombre apresado con una botella de whisky encima.  Es un mundo que no huele bien, pero es el mundo en el que usted vive.  No es extraño que un hombre sea asesinado pero es extraño que su muerte sea la marca de lo que llamamos civilización".2


Es curioso, Garcia Marquez en un contexto aparentemente muy alejado, escribió “Crónica de una muerte anunciada”. En esa novela todo el mundo sabe quien es la víctima que va a morir, y sabe quien es el culpable... A mi modo de ver esa metáfora está presente en una gran cantidad de sucesos de nuestros días... Me parece que todo el mundo sabía en Colombia (y lo sabe en el mundo) quien o quienes es o son los culpables de las grandes matanzas últimas.

En otro artículo que desafortunadamente he perdido y no he vuelto a encontrar, Piglia hace una relación histórica de La novela Negra. Pero su historia llega hasta “la guerra fría”. Cuyo gran maestro -creo. Es John Le Carré

Admiré y admiro mucho a John Le Carré. Por los días en que escribí VILLA FORTUNA Le Carré era mi escritor favorito. (Siempre estaré agradecido de la oportunidad de haber conocido a Smiley y haber dejado que llenara tardes que de otra forma hubieron sido vacías.). Pero la Guerra Fría ha pasado. La Unión Soviética y el muro de Berlín han caído. Y creo que no hace falta ser demasiado agudo para darse cuenta que es inútil insistir en ese camino... una situación fortuita y desgraciada -muy desgraciada- me ha dejado conocer las consecuencias de la violencia actual... Me refiero a la Violencia en Colombia..

Ciertos hechos desnaturalizados, (los aserramientos de personas vivas, la tortura más sádica llevada al limite) . Hechos que son inenarrables, mantuvieron mi vida en vilo. No porque estuviera ligado ni directa ni indirectamente a las víctimas, sino porque estos hechos crearon una serie de preguntas y sentimientos encontrados dentro de mi. La verdad, antes de escribir VILLA FORTUNA me despertaba a veces en las noches con la sensación de oír los gritos de los aserrados. Yo, que siempre he creído y creo que lo mejor que tiene Colombia es su gente, me preguntaba: cómo es posible que suceda algo así entre hermanos de la misma sangre, (??) y no podía entender esa crueldad.

Con el tiempo vine a saber que la causa principal de esos asesinatos colectivos ha sido la de despojar de la tierra a los campesinos pobres. Naturalmente la interpretación del periodismo oficial ha sido otra. Ellos (Tristemente, y este es otro capítulo que merecería reflexión y un trabajo narrativo que en VILLA FORTUNA se enuncia tímidamente) están habituados a encubrir los crímenes. Pero a la final eso ha sido una guerra de exterminio y el uso de métodos de extremada crueldad se debe a que sus autores quieren hacer huir en desbandada a los campesinos para que aterrorizados no quieran volver a sus tierras.

Cierta vez en que la ciudad de Helsinki me permitió exponer sobre la realidad colombiana frente a un público internacional. Me sorprendí al ver cómo gentes de distintas partes del mundo (Paquistaníes, Somalies, Arabes...) no solo parecían identificar los sucesos en mi país como sucesos que ellos habían conocido en sus propios paises, sino que se atrevían a ilustrar con ejemplos (desgraciados ejemplos, desgraciados sucesos). Los iraquíes hablaron del papel de gente como “Blackwater” que en el fondo no eran más que otros mercenarios iguales o muy parecidos a los sicarios. De esta manera fui comprendiendo poco a poco que la violencia en Colombia no era una mera situación nacional sino del mundo. Hoy creo que la época de la Guerra fría ha pasado para dar lugar a una nueva época (la peor de todas) La época de la guerra Sucia. Eso es lo que de alguna manera refleja VILLA FORTUNA.

2 comentarios:

Pilar Alberdi dijo...

Muy interesante lo que dices y la ampliación que haces del tema con la opinión de terceras personas; por un lado, del mundo de la literatura (Piglia), y por otro, habitantes de diferentes países que entienden como similares sus dramáticas vivencias sociales.
Saludos.

Unknown dijo...

Hola! Como estás?
Passando para apreciar sua escrita!
bjs